La mano y el brazo
Publicado en el Diari de Tarragona el 30 de abril de 2020 El pasado domingo, después de mes y medio de confinamiento, los niños pudieron salir por fin de sus hogares para correr, saltar y jugar al aire libre. Los expertos en salud infantil llevaban semanas aconsejando esta medida, teniendo en cuenta los efectos físicos y psíquicos que el encierro comenzaba a causar en los menores. Tras un largo debate sobre los límites de estas salidas (edad, distancia, actividad, contacto) el gobierno decretó una serie de condiciones para asegurar que este permiso excepcional no echase por tierra lo conseguido con tanto esfuerzo individual y colectivo. La principal norma que se impuso a los padres y madres consistía en mantener la distancia de seguridad, vetando de esta manera los reencuentros de amigos y los juegos compartidos que podrían reactivar la cadena de contagios. Lamentablemente, a las pocas horas de ponerse en marcha esta medida, comenzaron a circular numerosos vídeos que demo