Los monos de Toshogu
Publicado en el Diari de Tarragona el 27 de julio de 2014 La montañosa ciudad de Nikko, al norte de Tokio, alberga un espectacular conjunto de templos y santuarios que fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 1999. Aunque el complejo se inició hace mil trescientos años, los monumentos más visitados se erigieron en el siglo XVII para albergar los mausoleos de dos shogunes: Tokugawa Ieyasu y Tokugawa Iemitsu. En el primero de ellos puede verse la escultura de tres simpáticos personajes cuya popularidad ha dado últimamente la vuelta al mundo: los monos sabios o místicos de Toshogu. Hoy todos conocemos a Mizaru, Kikazaru, Iwazaru, caracterizados por taparse los oídos, la boca y los ojos respectivamente. Han sido muchos los significados atribuidos a esta talla de madera, desde la obligatoriedad de acatar sumisamente el sistema feudal, hasta la simplista apología del desinterés que se ha extendido por occidente. Sin embargo, la tradición nipona ha vinculado tradicionalmente