Comisión para la Demolición
Publicado en el Diari de Tarragona el 31 de mayo de 2020 Hubo en tiempo en que las dimensiones de la amenaza nublaron nuestro entendimiento, hasta hacernos olvidar el perfil que abunda mayoritariamente entre nuestra clase política. Los llamamientos a la unidad para compactar la respuesta al descomunal reto que teníamos ante nosotros parecieron disfrutar de cierta receptividad en los pasillos parlamentarios, pese a tratarse de un colectivo habituado a la bronca sistemática por puro cálculo electoral. Por un momento, pareció que todos los partidos comprendieron que debían aparcar temporalmente el tacticismo marrullero y cortoplacista, ante la oscuridad y la espesura de las nubes que asomaban en el horizonte. Pero sólo fue un espejismo, una vana ilusión, un ingenuo autoengaño. Tenemos lo que tenemos, y no se puede sacar de donde no hay. En efecto, tras una cortísima tregua inicial para asimilar colectivamente lo que nos venía encima, apenas fueron necesarias unas pocas semana